En la Universidad Tecnológica de la Huasteca Hidalguense (UTHH) se instaló una de las 100 estaciones sismológicas de país, dentro de un proyecto internacional denominado Mesoamerican Seismic Experiment, que tiene como finalidad la recopilación de información para la prevención de este tipo de movimientos sísmicos.
Lo anterior fue dado a conocer por la coordinadora del proyecto Dra. Xyoli Pérez Campos, quien agregó que en este proyecto participan dos universidades extranjeras, como el Instituto Tecnológico de California (CALTECH) y la Universidad de California en Los Ángeles; (UCLA), además de la UNAM, a través del Instituto de Geofísica, el Instituto de Geociencias, y el Instituto de Ingeniería; el Centro de Geociencias de Juriquilla, Querétaro y la Facultad de Ingeniería.
La científica explicó que esta estación forma parte de una línea que corre desde Acapulco, Gro. hasta Tempoal, Ver., “Y lo que estamos buscando es definir la estructura que existe debajo de nosotros, bajo de la corteza terrestre; nos interesa mucho esto para tener una mejor definición de las cosas que pasan en México”.
Al poder localizar mejor los movimientos, tenemos mejores planes de prevención de riesgo, saber que zonas tienen más riesgo sísmico, cuales no, y cómo viajan las ondas y cómo afectan a las ciudades”, añadió.
Externó que “en México los sismos pasan sobre todo en la costa del Pacifico pero las ciudades del centro nos afecta mucho, sobre todo en la Ciudad de México; y con estas estaciones podemos tener un mayor entendimiento de cómo está la estructura entre Acapulco, Gro., y la Ciudad de México; esto nos permite saber cómo se van a trasmitir las ondas y por lo tanto prever un plan de acción”.
La Dra. Xyoli Pérez Campos mencionó que se instaló un sismómetro de banda Ancha para registrar temblores, que cuenta con un sensor, un radio que transmite los datos a las otras estaciones, una batería alimentada con un panel solar para el sistema de datos, que se pueden transmitir a través de una antena de aire y bajar a una computadora, para que los datos puedan llegar a la Ciudad de México, vía internet.
Aclaró que “estos aparatos son tan sensibles que registran sismos que pasan al otro lado del mundo entonces no es porque estemos estudiando la sismisidad aquí, sino que al momento de viajar, los sismos pasan y recorren mucha distancia por abajo; al llegar aquí nosotros tenemos información de lo que recorrieron y por eso es que estamos instalando estaciones hasta tan lejos porque queremos saber la estructura y no porque la sismisidad pase aquí”.
Puso como ejemplo que los sismos de Indonesia de fines del año pasado; o incluso de menor magnitud, que ocurran al otro lado del mundo, con estos instrumentos se detectan muy bien.